Vivimos en un tiempo lleno de información, de estímulos constantes en las redes sociales, si queremos encontrar algo es muy fácil hacerlo, hace unos años quizás era menos invasivo, sólo mirábamos algunas fotos y nada más. Hoy en día incluso las noticias que no quisiéramos ver ya están en nuestra pantalla de inicio.

Pero, ¿hasta qué punto es saludable? ¿Cuál es la cantidad necesaria?, pienso que la razón porque no está siendo saludable es porque existe un exceso de todo, anuncios y notificaciones constantes, sabemos lo que pasa y lo que no sin pedir por ello, además las opiniones y las peleas constantes entre un lado y otro. El cerebro recibe una cantidad importante de noticias, lamentablemente la gran mayoría con una connotación negativa, las guerras, la economía, la delincuencia, el cambio climático, entre otros.

Cuando recibimos esta permanente estimulación el cerebro tiene una respuesta, no sólo de preocupaciones sino también de frustración y desconfianza. No es que sólo a algunos les pase, es la forma en que trabaja nuestra mente, no somos necesariamente conscientes, sin embargo, cada día estás reforzando y creando una realidad por medio de la información que te brinda las redes sociales. Quizás sin darte cuenta estás intentando buscar una solución porque esa es la manera que tiene nuestra mente de actuar y reaccionar, es natural.

Algo que puede ayudar, aunque seguro ya estés cansado de escucharlo, es reducir el tiempo que estás viendo las redes, todos lo hacemos, lo primero al levantarnos es ver el móvil. Es difícil dejar de hacerlo porque se ha convertido en un hábito.

Sin embargo, es necesario ver y estar atentos a cómo está afectando a nuestro día a día, como actúo, de qué manera veo el mundo, esto es un importante paso para ser conscientes y darnos cuenta si nos está ayudando o quizás está empeorando nuestra vida, nuestra manera de estar.

Entonces para cambiar intenta reemplazar, por ejemplo, si por la mañana siempre ves el móvil, ahora escribe, compra un libro, algo que sea interesante para ti, quizás hacer algunas respiraciones, meditar, tomar un café siendo consciente y estando presente mientras lo haces. Las cosas más sencillas son también importantes para nuestra salud mental. ¿Es realmente necesario estar informado constantemente, esto hará que cambies lo que pasa en el mundo?

A veces es más importante intentar cambiar pequeñas cosas y costumbres en uno mismo que intentar cambiar el conflicto en el mundo.

Nuestro cerebro está cansado de recibir lo que recibe, en el budismo se dice que a pesar de que puede ser difícil cambiar un patrón, a veces es más fácil cambiar las semillas, es decir alimentar a nuestra mente con mensajes saludables. Sí todos los días veo información que me genera odio y rencor, es posible que se convierta en algún momento parte de mi propio comportamiento, convirtiéndome así en una persona difícil de llevar.

Existen consecuencias, es importante conocer y entender cómo funcionamos. Sí queremos tener una vida con más tranquilidad y paz es probable que lo que necesitemos es empezar a ver información más amable, más proactiva y que incluya el otro lado de la moneda: compasión, empatía y humildad. Al final la paz empieza dentro de nosotros.